Si hay alguien “allá” afuera, ¿qué le diríamos? Un grupo de investigadores del Lab. de propulsión de la #NASA ha diseñado un nuevo mensaje como propuesta para ser enviado y contactar, quizás, con vida inteligente. Aquí te cuento.
Anteriormente, en 1974, fue enviado al espacio, en dirección hacia el cúmulo globular M13, un mensaje de radio conocido como El Mensaje de Arecibo. Este nuevo mensaje sería una “actualización” del anterior que incluiría nuevos elementos para nuestros vecinos.
La nueva propuesta, “El Faro en la Galaxia (BITG por sus siglas en inglés), se trata de una onda de radio codificada en binario, centrada en conceptos que sean capaz de ser decodificados y entendidos por el receptor, es decir, conceptos de la física y matemática. El mensaje está compuesto de 13 páginas, con aproximadamente 204000 dígitos binarios (unos 25500 bytes), y la información está organizada siguiendo una secuencia lógica para permitir el entendimiento de la siguiente página en función de la anterior. Veamos qué contiene.
Pág 1: se trata del encabezado, que contiene la información imprescindible para la comprensión del resto del mensaje. Para ello, se muestra una representación binaria del sistema de numeración, indicando nuestro sistema de conteo (base 10).
Pág 2: se introducen los símbolos de operaciones matemáticas básicas (suma, resta, multiplicación y división) y los conceptos de indeterminación y de continuidad. Los símbolos usados se corresponden con los del Evpatoria Messages
Pág 3: incluye otros conceptos matemáticos importantes.
Pág.4: teniendo los símbolos, lo siguiente es describir el álgebra, por lo cual se agrega la definición de una variable y las operaciones, además de una representación gráfica del comportamiento de dos variables.
Pág 5: Se incluyen un sistema de medida para la longitud y el tiempo. Al no conocer su sistema métrico, la información se establece en términos de constantes universales. En este caso, se considera la transición entre los estados de espín cuántico de los átomos neutros del hidrógeno, debido a que este es constante. La longitud de onda de la transición (21.1061140541160 cm) permite definir un distancia espacial fija. El inverso de la frecuencia de la transición (7.0403×10^{-10} segundos por periodo) permite fijar la unidad del tiempo.
Pág 6: la siguiente página muestra los elementos más comunes para el humano. Para esto, se muestra el espectro de emisión del hidrógeno (el elemento más abundante en nuestro universo), indicado como la unidad base para el número atómico de los demás elementos químicos.
Pág 7: el mensaje avanza hacia la base fundamental de la vida: el ADN. Se representan las cuatro base que los componen, usando los elementos químicos indicados en la página anterior del mensaje.
Pág 8: la estructura helicoidal del ADN se muestra aquí y, debido a su papel central en la bioquímica humana, la acompaña una imagen de los humanos, junto con la trayectoria de un objeto que cae para ayudar con la orientación de la imagen.
Pág 9: aquí de agrega la ubicación de nuestro Sistema Solar en la galaxia, mostrando nuestra estrella principal, el Sol, y el sistema planetario (no está Pluton, por si lo estás buscando)
Pág 10 y 11: se muestra un mapa de la superficie de la Tierra vista desde el espacio, y se desglosan los elementos más comunes y las regiones de la Tierra: tierra, agua y aire, con personas sobre la tierra.
Pág 12: se les agrega una invitación a responder, con una imagen de dos telescopios y una onda electromagnética propagándose entre ellos. Es la manera de decirles “no están solos”.
Pág 13: finalmente, una página adicional con nuestra ubicación en el sistema solar.
Así se vería el mensaje completo:
Dentro de la propuesta también especifican el momento óptimo del año calendario en que debería ser transmitido el mensaje y la región de la Vía Láctea hacia donde debería ser lanzando, por ser la dirección más probable en que se haya desarrollado la vida. Además, proponen enviar el mensaje desde el Allen Telescope Array, al norte de California (EEUU) o con el radiotelescopio esférico FAST en China. Por supuesto, el envío de este tipo de mensajes siempre ha generado controversia dentro de la comunidad científica, por considerar que son acciones peligrosas. “No tenemos idea de quién pueda escucharnos”… Otros proponen establecer una comunicación pasiva, en las que seamos nosotros los que esperemos a ser contactados. Jiang, el líder del grupo, ha dicho que esta “es una invitación para todas las personas en la Tierra a participar en la discusión del mensaje” y que esperan que “una vez publicado el artículo, este pueda animar a más gente a pensar sobre esto”… ¿Tú qué piensas? ¿Deberíamos hacer el intento de contactar a la posible vida inteligente existente en nuestra galaxia? (mono)